El doctor Oscar Ignacio Dubrez resolvió hacer lugar a la Querella Autónoma solicitada por Andrea Klaus (madre del pequeño) y estableció un plazo de seis meses para la concreción de la investigación probatoria. Se trata del segundo caso en la provincia de Corrientes que se encuadra en el nuevo Código Procesal Penal. El primero fue en Goya.
Durante la mañana de este jueves 3 de agosto se realizó la audiencia de Querella Autónoma presentada por Andrea Klaus, madre del niño de dos años que falleció en febrero de este año ahogado en una pileta cuando estaba pasando unos días de vacaciones con el padre, ante el Juez de Garantías de la localidad de Santa Rosa, doctor Oscar Ignacio Dubrez.
A través de la Resolución N° 239/23 del Juzgado de Garantías de Santa Rosa, el magistrado, hizo lugar a la realización de las diligencias solicitadas por la querella que consideran que no pueden realizarse de manera propia. Por ello resolvió; colaborar con el informe socioambiental del domicilio donde se produjo el fallecimiento del niño y solicitar un informe a la empresa prestadora del servicio de telefonía móvil del padre del niño.
El pedido de autopsia
En relación de la autopsia solicitada consideró que “la causal de muerte, de asfixia por sumersión, es clara y se han presentado múltiples informes tanto de los profesionales que atendieron al niño como de la médica de la policía y el Instituto de Medicina Forense”. Por ello, el Juez entendió que “ya fue zanjada esa discusión y no se han rebatido los argumentos dados”.
Además consideró al respecto que, “la querella no presentó elementos que permitan revertir lo que fue descripto en el informe solicitado por el Ministerio Público ni se rebatieron los argumentos dados”.
Pedido de Querella Autónoma
En primer lugar, la abogada de Klaus argumentó el pedido ante el Juez de Garantías y explicó que “desde que fue notificada de la muerte de su hijo, la madre preguntó si se realizó la autopsia del menor y no obtuvo explicaciones”.
Agregó; “Consideramos que hay intencionalidad y animosidad ya que los familiares y el padre son responsables de la muerte del niño y no tuvieron comportamiento de humanidad”. Además explicó que el niño había sido diagnosticado con TEA (trastornos del espectro autista) y que los gastos de la autopsia que se quiere realizar correrán por cuenta de la familia Klaus.
La madre del pequeño
Por su parte, la madre del niño también tuvo oportunidad de argumentar el pedido, y mencionó que; “desde que fue diagnosticado con TEA el padre conocía que debía tener un cuidado especial y velar por la vida de su hijo”.
Y explicó que “Siento que hay un montón de cosas que no se tomaron en cuenta. Me dijeron que hicieron la autopsia y no está la autopsia, me bloquearon, no tuve explicaciones y se cerró muy rápido el expediente”. Y finalizó; “Yo se lo dejé con vida y me lo devolvió en un cajón”.
El caso
Andrea Klaus estaba separada de quien fuera su pareja y padre de Matías, por lo que en febrero pasado el niño fue a pasar unas vacaciones en la casa de los abuelos en Santa Rosa, Corrientes.
Allí también estaba su papá, quien lo buscó el 5 de febrero de su casa en Buenos Aires. El menor, quien padecía de autismo leve, quedó con una niña mirando la televisión cuando el hombre fue a atender la panadería ubicada en el domicilio. Cuando se percató que el pequeño no estaba, lo buscó en la casa y fue cuando al llegar al patio lo encontró sin vida en la piscina. Su muerte fue por asfixia por inmersión.
La mujer contó que la separación con quien fuera su pareja se dio tiempo atrás. Ambos se domiciliaban en Buenos Aires, él ingresó a Gendarmería Nacional y concluyó un curso de Criminalística Forense y al poco tiempo de recibido pidió la baja. Tras la separación regresó a su casa en la localidad de Santa Rosa, donde junto a sus padres tienen una panadería.