Con más de 30 años de trayectoria en el mercado local, Mamuschka comenzará a comercializar sus productos en latinoamérica y está avanzando en la tramitación para hacerlo también tanto en Estados Unidos como en Europa. Especialistas del INTI asesoraron a la empresa barilochense en el análisis de materias primas y en aspectos de producción, procesado y sistemas de envasado de productos.
Según una encuesta reciente realizada por la Statista Global Consumer Survey, Argentina es uno de los países del mundo con mayor consumo de chocolates y dulces —liderando el ranking con Alemania, Reino Unido, Brasil, Suecia, Suiza, Estados Unidos y España—. Frente a este mercado pujante, con la ayuda de INTI empresas nacionales del sector apuestan a la innovación en sus productos no sólo para satisfacer la demanda local sino también para abrir puertas al mercado externo. Este es el caso de la empresa Mamuschka, que comercializa más de 110 tipos diferentes de chocolates, además de panificados, pastelería, tostado de granos, café y helados artesanales.
“Luego de una muy buena temporada de verano, donde trabajamos con el turismo interno que eligió la Patagonia como destino, ahora estamos recibiendo consultas para exportar tanto a Estados Unidos como a Europa productos con certificación orgánica”, detalla Matías Carzalo, socio gerente de Mamuschka. “También tenemos clientes de latinoamérica, con quienes estamos evaluando diferentes formas logísticas para comercializar con fletes a costo razonable”, suma.
La firma nació en 1989 en la ciudad de San Carlos de Bariloche y una característica distintiva de sus chocolates es que toda su línea es fabricada bajo la denominación “Bean to Bar”, que se traduce como “desde el grano a la barra”. Además, implementa prácticas de elaboración orgánica, sin aditivos y con una selección del cacao en origen —de zonas amazónicas de Ecuador y Venezuela—, sus productos son libres de gluten, no utilizan lecitina de soja en sus composiciones (lo que no sólo evita la incorporación indirecta de pesticidas sino también los hace aptos para personas intolerantes a la soja), y han recibido premios internacionales en los International Chocolate Awards y los Academy of Chocolate Awards.
Especialistas del INTI trabajaron con la empresa tanto en análisis microbiológicos y de gluten, como en aspectos de producción, procesado de materias primas y sistemas de envasado. “Es muy positivo contar con una sede del Instituto en Bariloche, donde podemos canalizar demandas de asesoramiento tecnológico ante cualquier proyecto que surja, ya sea sobre nuevos mercados, productos o envases”, destaca Leonardo Otheguy, responsable del Sistema de Control de Calidad de la firma patagónica.
"El trabajo se enmarca en el compromiso que asumimos desde el Instituto con la industria de alimentos argentina para el desarrollo de tecnologías, la incorporación de la innovación y la construcción de redes —tanto con pymes del sector como con productores de materias primas con potencial de industrialización— como respuesta a los desafíos que se presentan en un escenario global cada vez más competitivo", concluye Marina Pérez del Departamento de Alimentos y Bebidas Patagonia de la sede de INTI en Bariloche.
En relación al futuro, Mamuschka asegura que seguirán comprometidos en trabajar con la cadena productiva, pensando en nuevos productos y con ingredientes más cercanos. También anticipan que están estudiando distintas formas de manipular el cacao, manteniendo un compromiso ambiental en envases y que están diseñando cajas de maridaje, para unir por ejemplo vinos de Río Negro como el pinot noir y mezclarlo con distintos cacaos.