A 69 días de la desaparición de Loan Danilo Peña, ocurrida en la localidad correntina de 9 de Julio, la Justicia aún no ha logrado desentrañar qué ocurrió con el niño de 5 años. Sin embargo, según el abogado José Fernández Codazzi, quien inicialmente representó a la detenida Laudelina Peña, tanto ella como su hija Macarena Peña conocen “la verdad de lo sucedido“.
En una reciente movilización por el Día del Niño, la madre del pequeño, María Luisa Noguera, imploró a su sobrina Macarena que dijera “dónde está Loan” y que “no mientan más”. “Decile a tu mamá que diga la verdad. No mientan, no digan cosas que no son. ¿Dónde lo llevaron a Loan?“, reclamó con desesperación.
Este lunes, Codazzi presentó un escrito a la jueza federal de Goya, Cristina Pozzer Penzo, ofreciéndose a prestar declaración testimonial sobre su actuación en la defensa de Laudelina Peña. Este ofrecimiento fue realizado a través de su nueva abogada, la colombiana Ángela Burgos.
Burgos aclaró que su cliente aún no ha prestado declaración y que “no está imputado de ningún delito”. Sin embargo, ha sido duramente criticado por el abogado querellante Fernando Burlando, quien cuestionó la decisión de llevar a Laudelina Peña a declarar en la Justicia ordinaria de Corrientes el pasado 28 de junio. En esa ocasión, Codazzi presentó la teoría del “accidente”, sugiriendo que el ex marino Carlos Guido Pérez había atropellado accidentalmente a Loan tras un almuerzo en la casa de la abuela del niño, Catalina Peña, en el paraje El Algarrobal.
Laudelina Peña (45) y su hija Macarena (21), ambas presentes en la comida del 13 de junio, han acusado a Codazzi de haberlas amenazado y de ofrecerles una casa, un auto y una moto a cambio de que sostuvieran esta hipótesis, acusaciones que el abogado niega rotundamente.
En el escrito presentado por Burgos, Codazzi se pone a disposición de la justicia para “rendir testimonial libre y espontánea” sobre su papel como abogado de Laudelina Peña, una de las siete personas detenidas en el expediente, y sobre quien pesa la única prueba firme: el plantado del botín de Loan en un lodazal.
Burgos argumentó que Codazzi ha sido “gravemente injuriado y denunciado sin fundamento” por su ex clienta y por otros abogados, quienes lo acusan maliciosamente de entorpecer la investigación sobre la desaparición de Loan Danilo Peña.
El polémico viaje nocturno que Codazzi realizó hasta Corrientes, en lugar de dirigirse a la Justicia federal de Goya, fue, según Burgos, en respuesta a un pedido de Laudelina Peña, quien temía por su vida debido al asedio de la comunidad local.
“Ningún profesional del Derecho podría prever que un cliente, por intereses personales, cambie lo que dijo en dos oportunidades”, afirmó Burgos. Además, destacó que Laudelina Peña fue a “denunciar episodios relacionados con la desaparición del niño y amenazas coactivas por parte de los señores María Victoria Caillava y Carlos Pérez“, sin imaginar que esto desencadenaría una situación tan “delirante, absurda y de un ensañamiento extremo”.
El escrito también subraya que el “gravísimo, desmedido y aberrante hostigamiento” que Codazzi ha sufrido a raíz de las declaraciones de Laudelina Peña, quien ha cambiado de versiones constantemente, ha provocado daños irreparables en sus hijos menores, de 6 y 11 años.
Finalmente, Burgos acusa a Laudelina Peña de haber obstruido la investigación con falsos testimonios, lo que ha dañado a muchas personas y, sobre todo, a la búsqueda de la verdad sobre lo que ocurrió con Loan Danilo Peña.
Mientras tanto, Laudelina Peña, ahora representada por la abogada Mónica Chirivin y detenida en el penal de Ezeiza, no ha aportado datos relevantes en su cuarta declaración. Codazzi, por su parte, sostiene la hipótesis del “accidente”, según la cual Pérez, bajo los efectos del alcohol, habría atropellado a Loan y luego lo habría cargado en la caja de su camioneta, acompañado por Caillava, quien en ese momento era funcionario municipal. Aunque se encontraron manchas de sangre en el vehículo, aún no se ha podido comprobar que pertenecieran al niño.
Con información de diario Clarín