Durante dos semanas, vecinos y turistas se acercaron hasta el Centro Cultural Adolfo Mors en el parque Cambá Cuá, con interés de aprender a bailar chamamé. De manera totalmente gratuita, jóvenes y adultos adquirieron técnicas en diferentes estilos y conocieron un poco más sobre la música chamamecera.
Con la participación de más de 80 personas, culminaron las clases gratuitas de chamamé en el Centro Cultural Adolfo Mors. La propuesta, por segundo año consecutivo, fue impulsada por la Municipalidad de Corrientes en el marco de las actividades complementarias por la Fiesta Nacional del Chamamé.
Vecinos y turistas se sumaron a esta actividad gratuita desarrollada por la Secretaría de Cultura y Educación del municipio y durante cuatro clases –dos veces por semana- aprendieron o reforzaron técnicas sobre esta danza folklórica.
Una de las profesoras a cargo, Silvana Benítez, integrante del ballet folklórico municipal Siete Corrientes, contó que los participantes “aprendieron diferentes estilos chamameceros, de todo lo que conlleva el paso y las diferencias en cada uno de ellos; se les enseñó un poco también sobre la música”.
La docente destacó la gran convocatoria de público durante estos días: “La gente que pasa y ve se suma porque quiere aprender a bailar de una forma tan informal; para nosotros como profesores es súper enriquecedor ver la convocatoria de los chicos”, resaltó al tiempo que comentó que aproximadamente unas 80 personas se sumaron a las clases.
Animarse y aprender
Desde el primer día, Gabriel Obes se sumó a esta propuesta junto a su esposa. Ambos del barrio Cichero se enteraron de la convocatoria por las redes sociales de la Municipalidad. “La experiencia es hermosa, me encantó”, expresó entusiasmado. “Nosotros creíamos que sabíamos bailar chamamé, pero nos dimos cuenta acá que no”, dijo entre risas, “lo que aprendimos nos pareció maravilloso”, concluyó.
Por su parte, su esposa Norma Ocampo confesó que “esta experiencia es lo más hermoso que me pasó en mi vida aprendiendo a bailar porque uno es correntino y piensa que sabe bailar chamamé, pero cuando vinimos acá aprendimos las técnicas, los profes son geniales, tienen una paciencia, muy profesionales, nos dimos cuenta que en verdad estamos aprendiendo de cero y ahora ya vamos a perder la vergüenza cuando vayamos a algún festival, a alguna peña, vamos a salir a bailar sabiendo”, destacó.
Y para una próxima edición, invitó a otras personas: “Le diría a la gente que se anime, que vengan, que no dejen pasar estas oportunidades, porque normalmente se suelen pagar estas clases, acá son gratuitas y no tienen nada que envidiarle a ninguna otra academia y en pocos días, en cuatro o cinco clases, uno aprende a bailar de verdad”, concluyó la vecina.