Organizada por el Ministerio de Educación, se realizó el sábado en la Feria Provincial del Libro (ex Usina Eléctrica) la conferencia “¿Qué es, y para qué sirve, la Neurociencia Educacional”, actividad que tuvo como disertante a Andrea Goldin, autora de “Neurociencia en la escuela”, el ensayo con que obtuvo el premio Isay Klasse al mejor libro de educación.
El libro de Goldin se titula “Neurociencia en la escuela. Guía amigable (sin bla bla) para entender cómo funciona el cerebro durante el aprendizaje”. Según la autora, esta obra busca acercar de una manera amigable, algunos de los conocimientos que existen en el campo de neurociencias y ayudar a mejorar el sistema de enseñanza aprendizaje
“No es una varita mágica, no es que por leer el libro se cambia todo, es simplemente una herramienta que puede tener el docente a la hora de pensar su propia práctica”, dijo Goldín en tanto explicó que hay distintas formas: “Por ejemplo, en el libro discutimos la importancia de dejar pasar tiempo para que los aprendizajes se afiancen y se consoliden bien, y cómo eso se puede implementar en una práctica pedagógica dentro del aula. También explico cómo, descansar bien va a afectar el rendimiento y cómo se pueden implementar pequeños cambios, pequeñas ideas para mejorar las prácticas docentes”.
Con respecto a la edad ideal para que un niño aprenda a leer, consideró: “Las investigaciones no dicen que los niños pueden aprender recién a los seis años, puede aprender antes si se aplica un método de enseñanza correcto. La idea básica es juntar letras con sonidos, pero tampoco está mal si aprenden a los seis años, el tema es que puedan adquirir temprano el conocimiento (en la primaria), porque recién cuando uno tiene el conocimiento, puede empezar a leer cada vez más rápido y cuando tiene fluidez lectora es cuando puede comprender ideas complejas, comprender como una idea se relaciona con otra. Aprendemos a leer para poder transmitir cultura, para poder tener ideas críticas, pensamientos propios”.
Por otra parte, la experta hizo hincapié en la importancia de aplicar cambios a todos los niveles para mejorar el sistema de enseñanza, “Debemos aplicar desde pequeños cambios, hasta cuestiones de formación docente y cuestiones de política económica”, marcó.
A los docentes recomendó: “No le tengan miedo a las neurociencias pero tampoco le tengan un exceso de respeto. Sean críticos, no piensen que es una barita mágica pero tampoco las evite”.