Un joven de 21 años fue detenido en la capital correntina tras estar vinculado a una extensa red internacional dedicada a la explotación sexual infantil. A través de su teléfono celular, recibía material audiovisual explícito que involucraba a menores de edad, contenido por el cual pagaba 65 euros. La detención fue realizada por la Policía de Corrientes mientras el joven realizaba entregas como Delivery.
La investigación, que comenzó en Múnich, Alemania, fue liderada por la policía de ese país, revelando la existencia de una red global de explotación de niños y adolescentes que operaba a través de plataformas digitales. Entre los consumidores de este material ilícito se encontraba el titular de un teléfono con código de área 3794, correspondiente a Corrientes.
El Juzgado de Garantías Número 3, bajo la dirección de la jueza María Josefina González Cabañas, solicitó la colaboración de la Prefectura Naval Argentina y de la Dirección General de Investigación de Delitos Complejos y Delitos Informáticos. Con el apoyo de la Unidad Fiscal de Investigaciones Concretas 5, se logró recolectar las pruebas necesarias para identificar al sospechoso.
El martes por la noche, un grupo de detectives encubiertos de Delitos Complejos patrullaba el barrio San Martín hasta que finalmente lograron detener al joven en la vía pública. En ese momento, conducía una motocicleta Honda Wave 110 equipada con una caja térmica para entregas, y se dirigía a entregar comida a un cliente.
El delito por el que se lo acusa en Argentina está tipificado como “Infracción al Artículo 128 del Código Penal Argentino”, relacionado con los “delitos tecnológicos vinculados a la explotación sexual de niños y/o adolescentes en la red”. Tras la incautación del teléfono y otros elementos de prueba, el joven fue puesto a disposición de la Justicia.
La acción conjunta de la Justicia correntina y la Policía provincial permitió dar respuesta a una investigación que había comenzado en Alemania, donde se detectó la operatividad de una célula principal dedicada al tráfico de material sexual con menores.
La comercialización de fotos y videos se realizaba a través de una plataforma digital, a la que se suscribían personas de varios países. Mediante un programa especializado, las autoridades lograron rastrear las imágenes, en las que se evidencian abusos sexuales a menores de edad, cometidos por adultos en diferentes escenarios.
El celular localizado en Corrientes fue identificado como uno de los receptores de este contenido explícito relacionado con la pedofilia. Según datos oficiales, las autoridades alemanas llevaron a cabo 15.520 investigaciones de abuso infantil el año pasado, en comparación con los 15.507 casos registrados en 2021 y los 17.437 incidentes de violencia sexual contra menores de 14 años en 2022.
Con información de diario Época