La política de la localidad correntina de Santo Tomé está en llamas tras la indignante denuncia que involucra a la concejal peronista K, Blanca Gales. Según trascendió, la edil habría utilizado a una persona con discapacidad mental para promocionar su espacio político, exponiéndolo en actos y redes sociales sin su debido consentimiento.
El caso salió a la luz luego de que Gales realizara una transmisión en vivo con “Bebecho” a su lado, la cual fue eliminada minutos después. Sin embargo, el hecho no pasó desapercibido y generó un masivo repudio de vecinos, organizaciones sociales y referentes de derechos humanos, quienes exigen justicia.
Posibles delitos y sanciones legales
Especialistas en derecho advierten que el accionar de Gales podría encuadrarse en la figura de abuso y explotación de personas vulnerables, un delito que contempla penas de hasta seis años de prisión. Además, se estaría violando la Ley de Salud Mental y la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, normativas que garantizan el respeto y la dignidad de las personas en situación de vulnerabilidad.
Crece la presión para que intervenga el Concejo Deliberante
En medio del escándalo, dirigentes locales y referentes políticos exigen la inmediata intervención del Concejo Deliberante y sanciones ejemplares contra Gales. “Esto no es política, es un atropello a la dignidad humana”, expresó un dirigente local. Mientras tanto, organizaciones sociales anunciaron que presentarán denuncias ante la Fiscalía y el INADI.
Silencio oficial y una crisis institucional en ciernes
Ni Blanca Gales, ni el intendente de Santo Tomé, Víctor Giraud, hicieron declaraciones públicas sobre la situación. El silencio no hace más que aumentar la indignación de la comunidad, que clama por respuestas inmediatas.
El caso abre un debate profundo sobre los límites éticos en la política. La sociedad de Santo Tomé ya parece haber dado su veredicto: la dignidad humana no se negocia.
Con información de Urgente Santo Tomé