Una serie de estudios desarrollados en la UNNE actualizó el registro de especies de hormigas de la gran región “Chaco Húmedo”, y aportó información sobre los efectos de la acción antrópica en la estructura del ensamble de hormigas en este sitio de alta biodiversidad que incluye zonas de Argentina, Paraguay y Brasil. Se busca establecer “hotspot” o puntos prioritarios de conservación.
Las hormigas constituyen uno de los grupos de insectos más abundantes en los ecosistemas terrestres, con una amplia distribución biogeográfica.
Ocupan una gran variedad de nichos, desempeñando roles claves en las redes que componen cada ecosistema que habitan, además de ser indicadores del estado de los ambientes.
Pero el avance de la frontera agrícola, los desmontes, quemas de pastizales, urbanizaciones, son factores que alteran el ambiente y por ende el hábitat de las hormigas, y la composición de las estructuras que conforman estos insectos.
En ese contexto, en la gran región del Chaco Húmedo, caracterizada por su alta pluviosidad y gran biodiversidad, eran acotados los estudios realizados sobre la diversidad de hormigas y sus características ecológicas.
Ante ello, una serie de investigaciones realizadas desde el “Grupo de Investigación en Biología de los Artrópodos” (GIBA), de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE, actualizó y aportó nuevos conocimientos sobre la fauna de hormigas de esta región que ocupa gran parte del territorio de las provincias de Chaco, Santa Fe y Formosa, un sector del noroeste de Corrientes, el centro de Paraguay y una pequeña porción de Brasil.
“Las hormigas cumplen importantes roles en los ecosistemas, por eso es necesidad realizar estudios integrales de su diversidad considerando diferentes escalas geográficas, como las regiones biogeográficas”, explicó el Dr. Darío Daniel Larrea, investigador del GIBA-UNNE y becario postdoctoral del Conicet.
Agregó que, gracias a los estudios realizados en los últimos años, actualmente se cuenta con información sobre la diversidad y ecología de las especies del Chaco Húmedo, la influencia de la intervención antrópica en diversidad y ensambles de hormigas, y a la vez se confirma la eficacia de este grupo de insectos como indicadores de calidad ambiental en del Chaco Húmedo.
Diversidad de especies
Uno de los primeros pasos para conocer con mayor profundidad a las comunidades de hormigas del Chaco Húmedo era poder contar con un inventario actualizado de las especies que habitan el corredor.
Para ello, por medio de muestreos realizados en distintos sitios de Chaco, Formosa y Corrientes, así como la consulta de referencias bibliográficas, se logró actualizar el inventario de especies del Chaco Húmedo, con 515 especies identificadas para la región.
Además, se citaron 6 nuevas especies para Argentina y 8 especies endémicas, es decir que sólo se encuentran en el Chaco Húmedo.
La cantidad de especies encontradas en el inventario evidenció la gran relevancia del Chaco Húmedo para la conservación de la diversidad de hormigas en el Neotrópico
En esa línea, se resalta la cantidad de especies identificadas en el Chaco Húmedo teniendo en cuenta que en la Argentina hay 697 especies identificadas, y se estima que la intensificación de muestreos y su focalización en determinadas unidades ambientales podría incluso aumentar el número de especies en esta zona biogeográfica.
Modificación de ambientes
Tras la actualización del inventario de especies, se buscó identificar cómo el estado de conservación de los ambientes incide sobre indicadores de diversidad, composición y estructura de los ensambles de hormigas.
A pesar de su gran diversidad y abundancia, las comunidades de hormigas se ven afectadas por los cambios en el ambiente y la modificación de su hábitat, y en el caso de las selvas en galería del Chaco Húmedo se desconocía la influencia que ejerce en estos insectos el deterioro de los ambientes.
Para ello, se tomaron en cuenta tres estados posibles de conservación: “Bueno”, “Intermedio” y “Desfavorable”, y se realizaron muestreos exhaustivos de la fauna de hormigas.
Los resultados demostraron que los parámetros de diversidad analizados fueron entre un 30 a 50% más elevados en las áreas con buen estado de conservación, respecto a los sitios con un estado de conservación intermedio y desfavorable.
En tanto, se evidenció una mejor distribución de las abundancias de hormigas para las selvas en buen estado de conservación, mientras que en las selvas con otras categorías de conservación la dominancia de especies es mayor.
Esta variación en la diversidad y la composición de los ensamblajes sugeriría que la disminución en el estado de conservación de los ambientes estudiados afectaría los patrones de distribución de los ensamblajes de hormigas, se destaca entre las conclusiones del estudio.
Con esas observaciones, se pudo exponer cómo cambia la composición de especies de hormigas entre las selvas con distintas categorías de conservación, pues se confirma que la diversidad de hormigas encontrada en las selvas será inversamente proporcional al grado de intervención antrópica, y la “homogeneización” del ambiente influirá en la disminución de la cantidad de especies que pueden coexistir.
Tipos de diversidad
En el estudio de la incidencia de la acción antrópica, también se analizó como la alteración de los ambientes inciden en los distintos tipos de diversidad con los cuales se analizan a las especies.
Así, en el caso de la “diversidad tradicional”, que otorga la misma importancia a todas las especies, se observó una marcada incidencia de la acción antrópica, con indicadores que varían entre ambientes protegidos y degradados.
En cuanto a “diversidad funcional”, que analiza el rol ecológico que cumplen las hormigas, se comprobó que la misma disminuye al aumentar el estado de degradación de los ambientes, con pérdida de grupos funcionales que estaría asociado a una simplificación del paisaje.
No se reportó correlación entre la diversidad taxonómica y la riqueza de especies, y sobre ello se estiman necesarios estudios complementarios.
“Con este estudio se proporcionó una primera comprensión de aspectos biológicos, ecológicos, biogeográficos de los ensamblajes de hormigas en el distrito del Chaco Húmedo, y la incidencia de los cambios de ambientes por la acción antrópica” destaca el autor principal del estudio.
Hotpots
En base a la información generada hasta el momento, se está trabajando actualmente en la identificación de “hotpot” o puntos calientes que representan áreas prioritarias de conservación.
De acuerdo a las observaciones preliminares, hay algunos sitios de gran diversidad que están dentro de áreas protegidas como Iberá.
Pero existen muchos “hotpot” que no se encuentran dentro de áreas protegidas, por lo que sería bueno poder recomendar la conservación de algunos de estos sitios no solo para preservar la diversidad de hormigas sino también para mantener los servicios que estos insectos brindan al ambiente.
En Paraguay, por ejemplo, ninguno de los parques nacionales se encuentra dentro del Chaco Húmedo.
“Consideramos que nuestros datos representan un valioso aporte a la definición de nuevas áreas de importancia para la conservación de la diversidad de hormigas” indicó.
Relevancia de los estudios
“El inventario realizado, los nuevos registros, las especies endémicas detectadas, la clave taxonómica aportada, la comprensión de los aspectos ecológicos y de la acción antrópica representan importantes aportes al conocimiento de las hormigas en esta región, lo que permitirá comprender mejor, desde una perspectiva de manejo y conservación, el valor de esta zona tan afectada por los procesos de conversión de los ambientes naturales” finalizó el Dr. Larrea.
El Dr. Larrea es Licenciado en Ciencias Biológicas y Doctor en Biología de la UNNE. Además, es docente de las Cátedras “Biología de los Artrópodos” y “Biología de Invertebrados” de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y Agrimensura de la UNNE.
Actualmente es becario Posdoctoral del CONICET.