Después de los mensajes comprometedores, se habrían visto personalmente gracias a la complicidad del marido de Zaira Nara.

El culebrón entre la China Suárez, Mauro Icardi y Wanda Nara sumó un nuevo capítulo. A pesar de que la actriz ya regresó a la Argentina con sus tres hijos, su nombre sigue en boca de todos por un dato que dio Yanina Latorre en Los ángeles de la mañana: reveló que a la empresaria le llegó un mail con detalles explícitos del encuentro secreto que su marido tuvo con ella en París. También le dijeron que fue su marido quien le sacó el pasaje a la ex Casi Ángeles.

El encargado de enviar este mensaje fue alguien del círculo íntimo de Suárez, que escuchó de su propia boca cómo fue ese cara a cara en un hotel francés con el futbolista del PSG. Lo que más indignó a Wanda fue que ellos se habrían visto el fin de semana en el que ella viajó a Milán con su hermana Zaira, por eso señalan a Jakob Von Plessen -su cuñado- como cómplice del rosarino.

La panelista del ciclo que conduce Ángel De Brito remarcó que el marido de la menor de las Nara desmintió saber algo al respecto. Sin embargo, la modelo está furiosa y no cree ciento por ciento en la versión del papá de sus dos hijos, Malaika y Viggo.

Latorre también señaló que la China Suárez seducía a Icardi con videos de alto contenido sexual. Después de verlos, el deportista le habría dicho que era la mujer de sus sueños, además de insistirle con que a Wanda solo la quería como hermana o madre.

Después del escándalo, el matrimonio se reconcilió y festejó el cumpleaños número cinco de Isabella. Sin embargo, la alegría duró poco. Este lunes, Wanda viajó sola a Milán y eliminó el posteo en el que anunciaba que se había dado otra oportunidad con el jugador del PSG. Él, por su parte, habría cerrado su cuenta de Instagram porque supuestamente la China le habría mandado más mensajes.

La China Suárez aseguró que no inició el chat con Mauro Icardi

Cansada de recibir agravios, la actriz hizo un fuerte descargo en el que habló de sus relaciones pasadas y se declaró inocente de haber empezado la conversación con Mauro Icardi.

“Escribo esta carta para bajar el ruido externo de mentiras, maltratos y miradas inclinadas en la construcción de historias manipuladas para, una vez más, ser el chivo expiatorio de la violencia mediática”, comenzó diciendo.

Acto seguido remarcó que lo que sucedió tiene una historia detrás con la que muchas mujeres se podrán sentir identificadas: “Me ha tocado relacionarme con hombres a los que les he creído siempre sus palabras: que estaban separados o separándose y que no había conflictos”.

Entonces admitió que siente esta situación como un deja vu infernal en el que vuelve a pagar con su reputación “cuestiones que son del dominio personal de cualquier mujer”. “Una repetición que deja a la luz mi inexperiencia y sobre todo profunda credibilidad que le di a estos hombres que luego guardaron silencio dejando que me comieran los lobos”, sentenció.

Respecto a lo sucedido, sostuvo que es una situación que ella no comenzó, alentó ni provocó y habló de la asimetría con la que se juzgan los hechos ya que en su caso no deja de escuchar “calificativos dañinos.

Fuente: tn.com.ar