El director general de la organización sanitaria criticó al país vecino por sus grandes descuidos y advirtió que perjudican al resto de la región.
La situación pandémica en Brasil empeora cada vez más y su presidente, Jair Bolsonaro, no hace nada para cambiar el presente de su población, fuertemente afectada por el coronavirus. Frente a esto, el director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, apuntó contra las medidas tomadas y la gestión desde el inicio de la enfermedad. Los registros de nuevos récords de casos y muertes siguen preocupando y asustan de cara al futuro.
Sobre este tema, en conferencia de prensa desde Ginebra, el titular de la organización se mostró más que preocupado: "Si Brasil no es serio, continuará afectando a toda la región y más". Mientras que, siguiendo la misma línea, el director ejecutivo del programa de emergencias de la OMS, Mike Ryan, agregó: "No es el momento para que Brasil o nadie se relaje". A nivel global, los casos se encontraban en baja hace más de seis semanas pero todo cambió y piden seguir con las medidas sanitarias para evitar la circulación del virus.
Con respecto a esto y ante las diferentes campañas de vacunación en los diferentes países del mundo, advirtió: "La llegada de las vacunas es un momento de gran esperanza pero también uno donde potencialmente perdamos la concentración". Por esa razón destacan que los individuos sigan manteniendo la distancia, utilicen barbijos y se laven las manos, utilizando alcohol en gel y desinfectantes para evitar la transmisión.
Cabe destacar que Brasil se encuentra en uno de los peores momentos de la pandemia, rompiendo todos los récords posibles en relación a casos confirmados y personas fallecidas. En el reporte del miércoles, se contabilizaron 1.910 fallecidos -el número más alto desde marzo- y superaron los 260 mil decesos. Se encuentra solo detrás de Estados Unidos y tiene la tercera mayor cantidad de casos positivos reportados: casi 10,8 millones.
Como si esto fuera poco, varios estados brasileños colapsaron sanitariamente ante la segunda ola de COVID-19 y debieron transferir a pacientes graves a otras regiones. La variante del Amazonas, cada vez más contagiosa -tres veces más-, preocupa mucho pero desde el Gobierno no planean implementar ningún tipo de restricción nacional. Mientras tanto, Bolsonaro sentención: "En lo que dependa de mí, nunca vamos a tener un lockdowon (cierre total)".