La belleza del litoral argentino es inmensa y esta ciudad ubicada en el noreste de la Argentina, se destaca por su particular idiosincrasia, flora y fauna.
Corrientes se configura en el corazón del Mercosur teniendo una triple frontera con los países miembros y rodeada por la Hidrovía Paraná – Paraguay.
Al mismo tiempo limita con las provincias de Entre Ríos, Santa Fe, Chaco y Misiones, y los países de Paraguay, Brasil y Uruguay.
Fundación
La fundación de la ciudad, el 3 de abril de 1588, formó parte del proceso de conquista y poblamiento de un amplio sector del litoral fluvial argentino.
Inicialmente fue denominada Vera por su fundador, el adelantado Juan Torres de Vera y Aragón.
El valor estratégico, como así también la densidad aborigen del lugar, fueron factores altamente gravitantes en la decisión de su fundador para formar una expedición numerosa, que proveniente de Asunción, llegó al paraje denominado por los conquistadores de “las siete corrientes” haciendo alusión a las siete puntas pedregosas que el territorio prolongaba hacia el río.
Del contingente original solamente quedaron como pobladores 61 personas, constituidas por españoles y mestizos.
“Corrientes tiene payé”
Asimismo, actualmente, la provincia de Corrientes, integra la región del Litoral, son sus famosos ríos, lagunas, sus esteros, yacarés, yaguaretés, entre otros animales y variadas especies.
El vigor de su gente y sus tradiciones musicales hacen de Corrientes una de las provincias más singulares de la Argentina.
Por otra parte, el chamamé es la música tradicional de los correntinos, y en ella descansa la filosofía de vida de sus pobladores. La religiosidad de éstos se manifiesta también en procesiones y encuentros tradicionales que se mantienen vivos a lo largo de toda la provincia.
Entre los atractivos de Corrientes figuran los balnearios de los ríos Paraná y Uruguay, las catedrales e iglesias centenarias en el centro de sus ciudades, el enorme humedal conformado por los mundialmente famosos Esteros del Iberá; y toda la belleza de su homónima Capital, en donde la cultura se manifiesta a través de sus museos y de varias instituciones y edificios públicos cuyo estilo arquitectónico atesora reliquias de incalculable valor histórico y religioso.
El dorado, el surubí y el pacú les han aportado a sus ríos el color necesario para que todos los años, en Paso de la Patria, Esquina y en Goya, tengan lugar las tres Fiestas Nacionales de pesca más importantes del país.
“Corrientes tiene payé” reza el dicho, y es cierto. Basta con conocerla para enamorarnos de ella y para que su efecto de amuleto o imán nos atraiga siempre.
Además de la Fiesta Nacional del Chamame, sus carnavales artesanales llenan el verano correntino de brillo y color, donde llega la alegría de la gente, las familias, amigos y vecinos. Es en este momento donde se unen la noche con el día para lucirse en un espectáculo increíble, que data de los años 60, donde se alojaban jóvenes que llegaban de todo el país, para participar de las noches de corsos.
La pasión carnavalera que se presenta en la inmensa mayoría de los correntinos y turistas de todas partes del país, se activa desde el inicio de cada nuevo año. Por lo tanto, este evento se transforma en el centro de las miradas durante los meses de enero y febrero y tiene la ambición de ser una multitudinaria manifestación de cultura popular.
El carnaval de Corrientes es único por los magníficos diseños, bordados y carrozas que se caracterizan, además, por regalar al público un festejo inolvidable.