El, hasta hace poco, poderoso líder piquetero, Emerenciano Sena, enfrenta hoy las consecuencias del manto de impunidad con el que se manejó, junto a sus aliados políticos, incluido su testigo de bodas, el gobernador de la provincia del Chaco, Jorge Capitanich, quien luego de la desaparición y aparente crimen de su nuera, Cecilia Strzyzowski, parece haberle soltado la mano.
Emerenciano Sena nació el 10 de octubre de 1954, en una familia de trabajadores rurales, donde creció en condiciones de pobreza extrema, lo que le llevó a involucrarse en movimientos sociales desde una edad temprana.
En sus inicios fundó el Movimiento Territorial de Liberación (MTL), en la década de 1990, que rápidamente se convirtió en uno de los principales grupos de piqueteros en la provincia de Chaco, con una gran influencia y capacidad de movilización, lo que junto a su habilidad para las negociaciones políticas, le permitió establecer alianzas con diferentes gobiernos y líderes políticos en busca de apoyo para sus causas. En el año 2003, logró una histórica alianza con el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, quien también se encontraba al frente de una coalición política emergente en el país.
Esta alianza permitió a Sena tener acceso a recursos y programas estatales, lo cual fue aplaudido por algunos, pero también generó críticas por parte de quienes consideraban que el líder piquetero se había aliado con aquellos a quienes solía combatir.
Desde sus primeros días como activista durante la crisis económica de los años 90, Sena se erigió como una figura polémica en la política local. Su reputación aumentó aún más durante la crisis del 2001, cuando se convirtió en uno de los líderes más combativos de los grupos piqueteros en la región.
A medida que pasaron los años, se convirtió en una figura influyente en la provincia de Chaco, especialmente después de establecer el controvertido “Barrio Emerenciano“, un proyecto de viviendas estatales en Resistencia. Muchos lo comparan con Milagro Sala, la líder de la Tupac Amaru detenida en Jujuy, debido a su influencia y prácticas políticas.
Incluso, más adelante también les fueron adjudicadas escuelas de gestión social. Si bien se oficializaron 14, la oposición denunció en su momento que son más de 100. Una de ellas, también recibió el nombre de Emerenciano y fue criticada por la viralización de la imagen del mástil de una bandera de Cuba flameando junto a la argentina.
El barrio, cuenta con asfalto, centro de salud, biblioteca y hasta un natatorio al que nombraron -en un hecho que causó otra polémica- Santiago Maldonado. También tiene un jardín que funciona en tres turnos, una escuela primaria, una secundaria y un terciario.
Otras cuestiones también dejan expuesta la cercanía entre el líder piquetero y Capitanich, quien en 2014 fue su testigo de su boda con Marcela Acuña e hizo el prólogo de su autobiografía titulada “Emerenciano Caudillo del Norte”.
La relación política y personal entre Sena y el gobernador Jorge Capitanich ha sido un tema de discusión debido a que durante los gobiernos de Ángel Rozas y Roy Nikisch, Emerenciano Sena se posicionó como un fuerte opositor, pero todo cambió cuando Capitanich asumió el cargo en 2007. Desde entonces, se convirtió en un leal seguidor de kirchnerista y mantuvo una relación muy estrecha hasta la actualidad.
Con quien no tuvo un buen vínculo fue con Juan Carlos Bacileff Ivanoff, el vicegobernador de Chaco que tomó las riendas del poder local cuando Capitanich dio el salto al gobierno de Cristina Kirchner entre 2013 y 2015.
Bacileff Ivanoff llegó a acusarlo de “apretador profesional” y realizó manifestaciones en contra de los que “estafan a los humildes” acusándolos de ser “mercenarios que andan en camionetas 4×4 y tienen casas millonarias”.
Semanas atrás, Sena anunció su postulación como precandidato a diputado provincial y su esposa a precandidata a intendente de Resistencia en las elecciones primarias abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO) que se celebrarán el domingo 18 de junio. Sin embargo, la detención de ambos por el presunto crimen de su nuera, llevó al Frente Chaqueño a solicitar su exclusión de las listas electorales.
La detención de Sena y su esposa causó gran conmoción en toda la provincia, debido a sus vínculos y su historial cargado de polémicas. La investigación judicial por la desaparición de Cecilia Strzyzowski implicó a todo el “Clan Sena” y colaboradores en lo que se presenta como un macabro crimen premeditado con ribetes espeluznantes.
SOSPECHAN QUE CECILIA FUE ASESINADA Y DESCUARTIZADA EN LA CASA DE LOS SENA Y SUS RESTOS SE QUEMARON EN EL CAMPO
Casi dos semanas después de la desaparición de Cecilia Strzyzowski, la investigación penal considera varias hipótesis, pero algunas se convirtieron en las más consideradas por los fiscales que trabajan en el caso, así como por la familia de la joven y sus abogados.
A esta altura, con muchos elementos que fueron colocándose en el rompecabezas del caso, los investigadores creen que Cecilia fue asesinada en la casa de Emerenciano Sena y Marcela Acuña, en Santa María de Oro 1.460 de Resistencia, y que allí fue descuartizada para luego llevar sus restos a uno de los campos de la familia -o a otro predio rural- para ser enterrados o incinerados.
Las sospechan se basan en las imágenes de una cámara de seguridad que muestran a Cecilia ingresando al domicilio de sus suegros y otras que habrían registrado la salida, un rato después, de vehículos en los que se habían cargado bolsas y otros elementos. Allí podrían haber sido transportados los restos de Cecilia.
En paralelo, los datos sobre la posición de los teléfonos celulares de Cecilia y de su esposo, César Sena, indican que esos equipos estuvieron en el centro de Resistencia pero luego, en la noche de la desaparición, figuran como conectados a una antena próxima a uno de los campos de los Sena. A partir de ahí el teléfono de la muchacha no volvió a estar disponible.
OTRAS PRUEBAS E INDICIOS
También en la casa de los Seña se encontraron rastros de sangre “limpiados”, que se pueden detectar mediante una técnica que los peritos utilizan en posibles escenas de crímenes y que se basa en un tipo de luz que marca si en un recinto hubo o no manchas de sangre, aunque el lugar haya sido lavado. Las fuentes afirman que rastros de esa índole aparecieron en el piso y en paredes de la planta baja de la casa, que tiene también una planta alta.
Además, durante el allanamiento, se habría quebrado una de las colaboradoras de los Sena, que se desempeñaba como acompañante de Marcela en movilizaciones callejeras pero también hacía trabajos domésticos en la casa de su jefa. Ella, asustada por la dimensión del operativo y por las implicancias del caso, se apresuró a decir que Sena y Acuña le habían ordenado “limpiar todo”. No trascendieron los detalles que brindó y a qué se refería concretamente. Esta mujer, luego, ya con asesoramiento legal, no ratificó esos dichos en la justicia y se abstuvo de declarar.
Ayer martes, en tanto, otro detenido, el hombre que cuidaba el campo de la familia, habló ante la fiscalía (los Sena se abstuvieron de hacerlo) y dijo que en la noche de la desaparición de Cecilia vio llegar a sus patrones, que tras arribar avanzaron hacia otro sector, e indicó a qué partes del predio se dirigieron.
Como las cámaras de seguridad cercanas a la casa de Santa María de Oro mostrarían que a los vehículos que salieron de allí se subieron bidones, la hipótesis es que los restos se incineraron y eventualmente enterraron en esos sectores, que son los que se rastrillan hoy desde temprano.
Los Sena, hasta la última vez que hablaron del caso, negaron rotundamente tener alguna relación con la desaparición de Cecilia. Marcela Acuña fue quien llevó la voz cantante en el caso, y dijo que las sospechas y acusaciones contra su familia eran un intento de perjudicarlos. “Todo esto es político”, dijo, y llegó a decir que a la madre de Cecilia “le están pagando” para involucrarlos.
Con información de nortechaco.com
