La Provincia trabaja en la ampliación de la red de gases medicinales del hospital “Ángela Iglesia de Llano” de la ciudad de Corrientes, dotándolo de un nuevo tanque de oxígeno y nueva infraestructura operativa y de seguridad.
Esta obras, encarada por el ministerio de Obras y Servicios Públicos, mediante la intervención de la Dirección de Planificación y Obras (DPO) son emprendidas bajo el concepto de que en los hospitales o instituciones de salud, los gases medicinales se utilizan con distintos fines, especialmente en el tratamiento crítico de los pacientes.
Por ejemplo, el oxígeno y el aire comprimido se utilizan para el funcionamiento de los respiradores y las máquinas de anestesia, por lo que la vida de los pacientes depende de ellos, lo mismo ocurre con la aspiración, la cual, si bien no es un gas propiamente dicho, se utiliza en quirófano y en terapia para aspirar secreciones o supuraciones, por lo cual dicho sistema es considerado como gas medicinal, soporte de vida.
Las Obras
Con están consideraciones, en el Llano, se realiza un rediseño de la red troncal o principal que es la encargada de distribuir los gases por los servicios del hospital, esto es fundamental para que durante la utilización de los mismos no existan problemas de presión, brindándole mayor seguridad a los pacientes.
En este sentido se construyó una platea nueva para el tanque criogénico de oxígeno recientemente instalado, así como un nuevo cerco perimetral para aumentar la seguridad y poder ampliar la capacidad del tanque y la autonomía de oxígeno del hospital.
También se reemplazó la sala de compresores antiguos por unos compresores a tornillos de última generación, los cuales además de aumentar el caudal y la presión del aire generado, brinda un importante ahorro de energía eléctrica por el aumento de eficiencia que conllevan, a la vez de aportar una mayor seguridad en la provisión por ser moderno y previsible de su funcionamiento.
Por otra parte, se instaló la red central en el sector de Sala de Hombre y Sala de Mujeres, completándose la red con un total de 26 poliductos de cabeceras, los cuales incluyen los gases medicinales, la instalación eléctrica y la iluminación, estando todo controlado por alarmas de presión en el sector de enfermería.