La celebración por la Coronación de la Virgen de Itatí, que cada julio convoca a miles de fieles, quedó este año eclipsada por una medida municipal que generó una fuerte polémica: el cobro de estacionamiento anticipado en el ingreso a la ciudad. Para muchos, se trata de un “peaje encubierto”. Desde el Municipio aseguran que la información fue distorsionada, aunque confirman que rige un canon para vehículos de gran porte.
Juan Castillo, secretario de Cultura y Turismo de Itatí, salió a aclarar el tema tras la polémica generada por la ordenanza N° 3/2025, que fija un bono diario de ingreso para automóviles, colectivos y camiones. “Hasta ayer, que fue 14, e ingresó el gobernador con los peregrinos de San Luis, no se estaba cobrando estacionamiento a los autos”, afirmó el funcionario en declaraciones a Radio Sudamericana.
¿Peaje o estacionamiento?
La medida contempla un bono diario de $5.000 para autos particulares, $30.000 para colectivos y camiones, y tarifas diferenciadas para minibuses: $10.000 por viaje para residentes y $20.000 para no residentes. Si bien aún no se implementa el cobro para los autos, la ordenanza está vigente y prevé su aplicación.
Castillo negó que actualmente se esté cobrando en el acceso a la ciudad a todos los vehículos: “Estuve en contacto con quien está a cargo del acceso y me aseguró que no se les estaba cobrando a los automóviles”. Sin embargo, admitió que sí se les cobra durante todo el año a los transportes comerciales como combis, minibuses y camiones “que vienen a vender productos”.
Contexto político y críticas
El secretario no esquivó las críticas que comenzaron a circular en redes sociales y medios. “Hace días que se viene divulgando esta cosa y se viene juzgando a Itatí”, dijo, y atribuyó el revuelo a cuestiones electorales: “Es un año político donde en todos los sectores se está hablando”.
Castillo también defendió la iniciativa al remarcar que “en otras localidades también se hace” y que “es una orden del intendente”. Desde su visión, el canon busca regular el tránsito y evitar colapsos en fechas de alta concurrencia como las fiestas patronales.
Aunque todavía no se aplicó masivamente el cobro para autos particulares, el anuncio generó malestar entre fieles y turistas, que consideran inapropiado imponer tarifas en un contexto de devoción religiosa. “Venimos a cumplir promesas, no a pagar peajes”, se escuchó decir a más de uno en redes sociales.