El presidente Javier Milei decidió apartar de su cargo a la canciller Diana Mondino tras el voto de Argentina en la Asamblea General de la ONU en contra del embargo de Estados Unidos sobre Cuba. La exfuncionaria cordobesa será sustituida por Gerardo Werthein, quien hasta ahora ejercía como embajador argentino en Estados Unidos.
Este cambio en el gabinete se produjo luego de que Mondino alineara el voto de Argentina con 187 países que solicitaron el fin del “bloqueo” a Cuba, una postura que contrasta con la rigidez de Milei en apoyo a las políticas estadounidenses. La destitución fue interpretada por el excanciller Diego Guelar como “la crónica de una muerte anunciada”, señalando que la posición inflexible de Milei contradice las tradiciones diplomáticas de Argentina en temas de política exterior.
Guelar, quien también fue embajador en Estados Unidos, destacó que la diversidad de pensamiento es crucial en la Cancillería y expresó su preocupación por la posible falta de continuidad en la política exterior argentina, independientemente de los cambios de gobierno. En cuanto al voto sobre el embargo, Guelar observó que incluso los aliados de Estados Unidos apoyaron la resolución, poniendo en duda la efectividad de la medida.
La administración de Milei también inició una auditoría en el personal de Cancillería, generando inquietud entre diplomáticos y expertos en relaciones exteriores. La remoción de Mondino y las medidas de control dentro de la Cancillería reflejan el firme posicionamiento de la gestión actual, aunque generan un debate sobre el futuro de la política exterior argentina.