Ante la crecida de los arroyos Itá Cuá y Pariopa, en el departamento de Santo Tomé, la Dirección Provincial de Vialidad debió restringir el tránsito en los puentes respectivos de la ruta provincial N° 94 a fin de evitar consecuencias. Desde el organismo informaron que una vez que el agua baje a un nivel que permita evaluar posibles daños estructurales y del terraplén debido a la erosión propia del fenómeno, podrá tomarse nuevas decisiones en cuanto a la transitabilidad. La medida obedece a evitar inconvenientes mayores, tanto de seguridad como de preservación de la estructura vial afectada.
La ruta provincial Nº 94 se extiende desde la ciudad de Santo Tomé hasta el arroyo Chimiray, siendo vía de comunicación con la provincia de Misiones. Y ante la crecida de los arroyos Itá Cuá y Pariopa, los respectivos puentes en ese tramo se vieron afectados por inundaciones. “Los terraplenes de las losas de los puentes están erosionados, entonces la estructura queda debilitada y ante esta situación si pasa un vehículo existe peligro de roturas”, advirtió el agrimensor Hugo Dubréz, vocal de Vialidad provincial.
“Estamos restringiendo el tránsito, porque existe el peligro que se corte definitivamente el paso por rotura de los puentes”, explicó el funcionario, aclarando que “una vez que el agua baje a un nivel de poder evaluar los daños reales, podremos tomar una decisión correcta en relación a su transitabilidad”.
Y pidió que esta situación se comprenda, “por una cuestión de seguridad y preservación, porque también tenemos que evitar mayores daños en las estructuras que obliguen a mayores restricciones en el futuro”.