Un día histórico vivió el Centro de Jubilados y Pensionados de la Provincia, con la inauguración de la Biblioteca y Sala de Lectura “Antonio C. Piñeyro”, que se concretó este martes en un acto desarrollado en el segundo piso de la institución ubicada en calle La Rioja 670 en Capital.
La puesta en marcha de este nuevo espacio para la cultura fue posible gracias a la aplicación de la Ley Provincial Nº 6333 de Mecenazgo, que promueve la asociación público-privado.
El régimen de Mecenazgo permite a los contribuyentes que tributan en la provincia de Corrientes destinar parte de lo que pagan en concepto del Impuesto sobre los Ingresos Brutos a proyectos culturales declarados de interés y aprobados por el Instituto de Cultura.
Acompañados por numerosos jubilados y pensionados, realizaron el tradicional corte de cintas del flamante lugar, el ministro de Hacienda y Finanzas, Marcelo Rivas Piasentini, el director General de Rentas, Fabián Boleas, el director de Artes Escénicas del Instituto de Cultura, Eduardo Sívori, la titular del Centro, Julia Fernández, y en representación de la empresa Previsora del Paraná, Norberto Arrúa.
La Biblioteca es el resultado de años de esfuerzo, dedicación y colaboración entre quienes comparten la pasión por la educación y el acceso a la cultura. Tiene como objetivo fomentar la lectura y la investigación, como así también ofrecer un espacio en donde los jubilados, pensionados y la comunidad en general puedan reunirse para aprender, reflexionar y compartir conocimientos.
Cuenta con una amplia colección de libros, revistas y otros recursos educativos. También se nutre con tablets con las que se puede acceder digitalmente a los contenidos bibliográficos y como dato importante, hay personal que brinda capacitaciones sobre el uso de la tecnología digital a los adultos mayores.
En tanto, en el ingreso se instaló un colorido mural que ambienta y evoca íconos de la correntinidad y de la cultura guaraní, entre ellos el Pombero, la Taragüicita y también está reflejada Tobuna, la primera yaguareté reinsertada en los Esteros del Iberá.
Ministro Rivas Piasentini
“Es motivo de orgullo ser parte de esta inauguración que refleja el primer proyecto de Mecenazgo a través de la Ley Provincial que está vigente”, dijo en primer lugar al tomar la palabra el ministro de Hacienda y Finanzas, Marcelo Rivas Piasentini, enfatizando que están en carpeta otros proyectos de este tipo para beneficiar a otras instituciones.
Para el titular de la cartera económica provincial, es clave la articulación público-privado, pregonada por la gestión del gobernador Gustavo Valdés, que impulsa de modo permanente estas iniciativas.
En cuanto a la presencia del sector privado, Rivas Piasentini explicó que en base a la Ley de Mecenazgo, las empresas se benefician con compensaciones fiscales, apuntando a “entusiasmar a las mismas para que inviertan en entidades sin fines de lucro”.
“Fomentar la lectura y cultura es fundamental para nuestros adultos mayores”, subrayó el ministro, quién para cerrar felicitó a “todos los que hicieron posible cristalizar este sueño”.
Fabián Boleas
En tanto, el director de Rentas de la Provincia, Fabián Boleas, valoró la habilitación de la Biblioteca como “herramienta útil para impulsar la lectura de los adultos mayores”.
“Creemos firmemente en la necesidad de transitar el camino de la responsabilidad social de parte del estado y del sector privado, que cuando se unen pueden lograr estas cosas”, concluyó afirmando Boleas.
Eduardo Sívori
También se expresó en representación del Instituto de Cultura, Eduardo Sívori, destacando que este es el “primer acto de mecenazgo gracias a la Ley Provincial y no tenemos dudas que vendrán muchos más”, agregando que “es importante incentivar a las empresas a que apoyen el ámbito de la cultura”.
Finalizando con sus conceptos, Sívori manifestó no tener dudas que el Centro de Jubilados ya forma parte de un “espacio cultural abierto a toda la comunidad”.
Julia Fernández
A su turno, la máxima responsable del Centro de Jubilados y Pensionados de Corrientes, Julia Fernández, dejó en claro que para “nosotros es un día histórico, especial y esperamos que este sea un lugar en donde todos puedan sentirse bienvenidos y encontrar inspiración a través de la cultura”.
Además de los 8500 socios que tiene el Centro, el espacio está abierto a todo aquel que quiera disfrutar de un momento de silencio acompañado de la lectura. “Tenemos libros que no se encuentran en otros lados”, agregó Fernández.
Destacó a su vez el aporte de los donantes generosos que brindaron los fondos necesarios, resaltando también la presencia de los nietos de Antonio Piñeyro, que donó en su momento una gran cantidad de libros y agradeció el aporte de todos los voluntarios dedicados a hacer realidad este sueño.