Jorge Burquet, sargento de Gendarmería Nacional Argentina, fue secuestrado, torturado y asesinado en la localidad correntina de Alvear.
El sábado a la noche fue encontrado en una chacra cerca del hípico local. Estaba maniatado, con los ojos vendados y una puñalada en el abdomen, pidiendo auxilio.
Sus propios camaradas acudieron al socorro por el aviso de un testigo. Burquet estaba sin prestar servicio desde el 24 de febrero.
Al llegar al lugar de los hechos, los efectivos vieron a varios sujetos correr hacia el campo, aprovechando la oscuridad. Burquet fue trasladado de urgencia al hospital de Santo Tomé, dónde llegó sin vida cerca de las 23, informaron fuentes oficiales, pero no sobrevivió.
Con el correr de las horas la investigación a cargo de la Fiscalía de Instrucción de Santo Tomé cuyo titular es el doctor Facundo Cabral, maneja varias pistas para lograr el total esclarecimiento de este hecho de sangre que terminara con la vida del gendarme formoseño.
AJUSTE DE CUENTAS
Una de ellas, en principio se inclinó por la teoría de una especie de ajustes de cuenta por cuestiones de carreras de caballos donde en esa localidad se llega a apostar sumas superiores a los dos millones de pesos en una carrera.
CARRERAS DE CABALLOS Y ALGO MAS
Las mismas fuentes consultadas por este portal, señalaron que la otra línea de investigación es que Burquet también supuestamente hacía las veces de prestamista y se movía siempre en un ambiente sumamente peligroso como ser los juegos de azar de todo tipo, apuestas clandestinas en carreras de caballos y venta de estos animales con la modalidad de contrabando al vecino país de Brasil a través del rio Uruguay donde se pagan sumas millonarias por un pura sangre.
DIJO QUIEN LE ASESTÓ LA APUÑALADA
Un dato muy revelador es que Burquet estando aún con vida, pudo hablar con los investigadores y dijo que, si algo le pasaba a él, como finalmente sucedió que perdió su vida; indicó a Toco Klug como el autor de la puñalada y que los otros dos malvivientes que se dieron a la fuga, hablaban en idioma portugués. Precisamente, Klug fue detenido luego por efectivos de la Comisaria de Alvear.
UNA HIPOTESIS MUY FIRME
Sin embargo, las autoridades no dudan en señalar que entre las actividades “no permitidas por la ley” en las que también Burquet supuestamente se movía; es el tan controvertido contrabando de soja Brasil, acaso una actividad ilícita que deja “buena ganancia” a las personas que se arriesgan a realizarlas.
En ese contexto, dicen que en Alvear es “vox populi” – aunque nadie quiere decirlo públicamente – que no habría que descartar que el gendarme también habría realizado algunos negocios de este tipo y se habría supuestamente quedado con un “cambio” que no le pertenecía. De ahí que las versiones se acrecientan cada vez más sobre esta última hipótesis por el que se cometió el asesinato. Aun así, la justicia trabaja a destajo para esclarecer el hecho que le costara la vida al gendarme formoseño.
*Con información de Digital Santo Tomé