La localidad correntina de Santo Tomé se encuentra conmocionada por la macabra muerte de un gendarme que fue hallado con un disparo en la sien, una media en el interior de su boca, y un precinto en el cuello.
Según información preliminar, la víctima, identificada como Alfredo Vivero (37 años), sería prestamista y presentaba un disparo, estaba atado con precintos y su boca estaba atorada con una media, detalles que llevan tratar el caso como un homicidio.
Trabaja en el marco investigativo personal de distintas áreas de la Unidad Regional V- de Santo Tomé y efectivos de la Dirección de Investigaciones de Delitos Complejos y de la Dirección de Investigación Criminal de Corrientes Capital y el Fiscal de Instrucción, Facundo Cabral. Dichas autoridades procedieron a la realización de las actividades periciales de levantamiento de huellas y pruebas.
El hecho ocurrió en el domicilio particular ubicado en calle Beltran 499, depto 1 de dicha localidad, y el informe detalla que, personal médico de Gendarmería al llegar corroboró que el cuerpo del sargento Vivero “estaba con el tronco sobre la cama decúbito ventral con las extremidades inferiores tocando el piso, con un aparente disparo en la sien y el arma reglamentaria cerca de la mano derecha”.
“Al colocar el cuerpo decúbito dorsal se observó que el occiso tenía un disparo en la sien con orificio de ingreso y salida de derecha a izquierda, una media en el interior de la boca, y un precinto en el cuello”, indicios por el cual el fiscal manifestó muerte dudosa, hasta la realización de la autopsia.
Vivero era oriundo de Pirané, Formosa y su esposa también pertenece a la fuerza nacional.