La Justicia de Corrientes dictaminó la liberación inmediata de Carlos Ramos, quien había sido detenido tras disparar y matar a Emanuel Ponce, de 32 años, en abril pasado en el barrio Ongay de la capital provincial. Ramos había señalado a Ponce como responsable del robo en su local comercial.
“No me esperaba este momento. La verdad, fueron meses muy duros”, señaló Ramos en declaraciones a la radio local, La Dos, tras conocer el fallo.
El abogado defensor de Ramos, Gustavo Briend, celebró la decisión de la Justicia y destacó el accionar de la fiscal Andrea González. “Prevaleció el sentido común”, subrayó el letrado, explicando que su cliente fue condenado por homicidio en estado de emoción violenta.
El caso se originó cuando la esposa de Ramos le advirtió que habían irrumpido en su domicilio para robar. A través de las cámaras de seguridad, el comerciante identificó a los responsables y presentó la denuncia en la comisaría 21, aunque los sospechosos fueron liberados al poco tiempo. Lejos de cesar su acoso, los delincuentes volvieron a las calles, provocando y burlándose de Ramos cada vez que lo veían.
El último episodio que desbordó la situación ocurrió cuando los ladrones ingresaron nuevamente a la vivienda de Ramos y saquearon el lugar. Fue entonces cuando, al día siguiente, el comerciante, en un acto desesperado, se cruzó con los sospechosos en las calles Yugoslavia y Cerdeña. Desde su vehículo, sacó un arma y disparó dos veces. Una de las balas impactó en el pecho de Emanuel Ponce, quien contaba con antecedentes por varios delitos. Su cómplice, conocido como “Martincito”, fue el único testigo ocular del crimen.
El comerciante se escapó del lugar, pero fue detenido pocas horas después. Todavía tenía en su poder el arma que usó para matar al sospechoso, que fue secuestrada por los investigadores.
Con información de radio La Dos