Ya se cumplen casi dos años de la aparición del coronavirus, que cambió el curso de la vida de toda la población mundial. Covid-19, se ha convertido en una palabra que atemoriza a la gente cuando la escucha, la pandemia que ha cogido a todo el mundo por sorpresa y ha dejado su huella en toda la sociedad. 

Daños de tipo económico, emocional, sexual, e incluso de tipo relacional, con efectos, por ejemplo, en la autoestima y la belleza. A día de hoy, la epidemia sigue afectando a todo el mundo, en diferentes escalas.

Se trata de un virus que ha obligado a establecer una nueva normalidad en la vida de cada uno. Desde entonces, ha habido muchas secuencias. Al principio, la población y los gobiernos se mostraron incrédulos ante la magnitud del virus. Luego se instauró una alerta general, las baldas de los supermercados se vaciaron y la sociedad empezaba a estar segura de que definitivamente no se trataba de una “pequeña gripe”, como la calificaron muchos jefes de Estado. Poco después se adoptaron diversas medidas para contener el virus, como el encierro, la cuarentena y el distanciamiento social.

El despliegue de la situación

Y fue a partir de entonces cuando la vida de toda la población mostró ya claros signos de estar totalmente cambiada. Las empresas ya estaban iniciando un fuerte movimiento hacia el teletrabajo, los colegios ya estaban cerrando sus puertas por lo que las familias con hijos en casa tenían que dedicarles más tiempo. Incluso los encuentros con las escorts más bellas de Corrientes capital ya se veían afectados.

Salones de belleza, esteticistas, peluqueros… Ya no había nada más. La ropa bonita que se usaba para salir a pasear dio paso al pijama para mucha gente. La consecuencia fue un fuerte flujo de baja autoestima durante este periodo.

¿Pero cómo prepararse para salir de nuevo? ¿Qué ropa ponerse? La gente ya no sabe más… Y precisamente por eso Skokka decidió profundizar en el tema y comentar algunos consejos de moda para la vida después del encierro.

La rutina se desvanece

Sin vida social, trabajando desde casa, muchas personas han perdido el hábito, o incluso las ganas, de vestirse cada día. Pero con el progreso del plan de vacunación y las noticias alentadoras que llegan, ya se puede ver una luz al final de este largo túnel que inicialmente parecía no tener fin.

Muchos países ya están relajando estas medidas de contención, o incluso planteando eliminarlas por completo. Esto representa un alivio para algunas empresas que ya se apresuran a volver a sus oficinas y sobre todo para las hermosas chicas escorts de Trelew ya que trabajan en contacto estrecho con sus clientes.

Cuando el aislamiento haya terminado por completo y la vida empiece a volver a la normalidad, convendrá retomar el hábito de vestirse bien y para ello, siempre es útil contar con algunos tips de moda.

Descubrir o redescubrir el estilo y la moda

Son muchos los memes que circulan por Internet y que retratan con humor la situación en la que se encuentran muchas personas: ¡Todavía no saben cómo vestirse exactamente! La verdad es que el panorama ha cambiado no sólo la vida cotidiana, sino también los armarios. 

El estrés, la ansiedad, la falta de actividades deportivas, entre otros muchos factores, han contribuido, por ejemplo, a que gran parte de la población mundial aumentará de peso. Lo contrario también puede ser cierto, ya que muchas personas adelgazan cuando están bajo presión. 

Incluso hay quienes simplemente son tan apáticos con todas las cicatrices que ha dejado el virus que no quieren volver a maquillarse, comprarse ropa, cambiar de estilo o algo relacionado…

Sea cual sea la situación. Como unidades dentro de una sociedad, es necesario respetar ciertas reglas y normas ya establecidas, y vestirse adecuadamente es una de ellas. Así que, tanto si se trata de volver al trabajo en la oficina como de salir a cenar con la pareja, pensar en qué ponerse es una buena idea.

Un buen tip es empezar por hacer una limpieza de todo el vestuario y evaluar las prendas que se tienen.

No hace falta ser un estilista personal para hacerlo. Simplemente coger un día disponible, puede ser ese domingo lluvioso en el que no hay nada que hacer y no te apetece quedar ni con una de las sexy kinesiólogas de Lima… ¡y ponerse a limpiar!

Mirar pieza por pieza para armar nuevos looks, probarlos para comprobar si todavía se ajustan al cuerpo y lo más importante… ¡Si todavía se ajustan al estilo!

Si no, un buen consejo es venderlos en tiendas de segunda mano, o incluso donarlos a alguien que los necesite.

Sin embargo, si es necesario, comprar algunas piezas neutras y algunos accesorios puede ser útil para renovar el look sin romper el bolsillo. El intercambio de ropa entre amigos también puede ser una solución interesante y barata. ¡A por ellos!

Al final, volver a la rutina y a la vida social puede ser algo maravilloso para el ánimo. Y el hecho de vestir bien influye directamente en ello. 

Fdo.: Luna Díaz