La ciudad de Corrientes se vistió de fe y tradición este 24 de septiembre, cuando miles de fieles participaron de la procesión en honor a la Virgen de la Merced, Patrona Jurada de la Capital. La jornada estuvo marcada por un hecho histórico: la imposición del Palio Arzobispal a monseñor José Adolfo Larregain, ceremonia encabezada por el Nuncio Apostólico en Argentina, monseñor Miroslaw Adamczik.
El Gobierno provincial, representado por el vicegobernador Pedro Braillard Poccard, acompañó la celebración junto a autoridades municipales y legislativas. “Esta es nuestra modalidad, vivir la fe con alegría y cercanía. Es una festividad profundamente religiosa, pero también parte de nuestra cultura”, señaló Braillard Poccard, al valorar la masiva concurrencia de fieles y el compromiso de las áreas provinciales que colaboraron en la organización.

En este marco, el gobernador Gustavo Valdés declaró Huésped de Honor al nuncio apostólico, distinción entregada por la ministra de Educación, Práxedes López, acompañada por sus pares de Turismo, Alejandra Eliciri; de Ciencia y Tecnología, Natalia Romero; y de Seguridad, Alfredo Vallejos. A su vez, el Senado provincial, la Cámara de Diputados y el Concejo Deliberante de Corrientes también declararon de interés la ceremonia.
La tradicional procesión partió desde la Iglesia Nuestra Señora de la Merced y recorrió las calles céntricas —25 de Mayo, Tucumán, 9 de Julio, Salta, Quintana y Buenos Aires— hasta regresar al templo. Vecinos de distintos barrios, delegaciones escolares, congregaciones religiosas y comunidades parroquiales se sumaron a la caminata de fe, acompañados por imágenes de santos, estandartes, banderas y la Banda de Música de la Policía.

Entre rezos, cánticos y pañuelos celestes y blancos, la multitud reafirmó su devoción hacia la Virgen de la Merced, en una celebración que volvió a demostrar el fuerte arraigo religioso y cultural de Corrientes.
El significado del Palio
La misa central estuvo presidida por monseñor Adamczik, quien impuso el Palio a monseñor Larregain. El ornamento litúrgico, confeccionado artesanalmente con lana de oveja, simboliza al pastor que guía a su rebaño y representa la comunión con el Papa. Por primera vez, esta ceremonia se realizó en Corrientes, otorgándole un carácter histórico a la festividad patronal.

Larregain, tras recibir el Palio y presidir la eucaristía ante miles de fieles, agradeció el acompañamiento del Gobierno provincial y la comunidad. “Se trató de un hecho inédito que quedará grabado en la memoria de nuestra Arquidiócesis”, expresó.

Bajo el lema “Con María, peregrinos de esperanza”, concluyeron las novenas, misas y rezos especiales que durante días unieron a familias, jóvenes, adultos mayores, enfermos y fuerzas de seguridad en torno a la Virgen de la Merced.