La alianza de gobernadores, conocida como Provincias Unidas, difundió sus principios y objetivos que buscan “dejar atrás el pasado, ordenar el presente y construir el futuro”. Con un mensaje directo al Gobierno nacional, los mandatarios advirtieron que “para las reformas que Argentina necesita hacen falta votos, no vetos”.
El bloque, integrado por Martín Llaryora (Córdoba), Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Gustavo Valdés (Corrientes), Ignacio “Nacho” Torres (Chubut), Carlos Sadir (Jujuy) y Claudio Vidal (Santa Cruz), se plantó como alternativa frente a la Casa Rosada. En su declaración remarcaron que existen “dos miradas” en el país: la tradicional, que gobierna desde hace décadas desde una lógica financiera, y la que ellos representan, “el interior productivo”.
“Argentina tiene con qué. Tiene materia prima, tiene talento, lo que no ha tenido es capacidad de organizarse. No vinimos a explicar el pasado, vinimos a dejarlo atrás”, señalaron en su lanzamiento.
Provincias Unidas marca ejes estratégicos:
- Revolución educativa: preparar a la Argentina para la inteligencia artificial y los cambios tecnológicos.
- Equilibrio fiscal y transparencia: un Estado sin corrupción, eficiente en el gasto y claro en la inversión.
- Infraestructura y obra pública: como motor de competitividad y articulación público-privada.
- Seguridad y paz social: como condiciones indispensables para el desarrollo.
La consigna central frente al gobierno de Javier Milei fue contundente: “Sí a los votos, no a los vetos”, en referencia a la necesidad de consensuar reformas en materia educativa, laboral, impositiva y previsional.
La movida se inscribe en la estrategia de los gobernadores de consolidar un proyecto político nacional. El cronograma de reuniones ya está en marcha:
- 30 de septiembre en Chubut,
- 9 de octubre en Jujuy,
- 15 de octubre en la ciudad de Buenos Aires.
Allí buscarán exhibir fuerza frente a La Libertad Avanza y al peronismo unificado bajo Fuerza Patria.
El pronunciamiento llega en un momento sensible: la Casa Rosada intenta recomponer relaciones con los gobernadores tras la dura derrota electoral en la provincia de Buenos Aires, donde el oficialismo cayó por más de 13 puntos ante el peronismo. En ese marco, Provincias Unidas se presenta como un actor que desafía la centralidad del poder porteño con un mensaje claro: “El futuro se construye desde el interior”.