Por Corrientes al Día
Ante el aumento sostenido de casos de influenza A y COVID-19 detectados en distintos laboratorios de la provincia de Misiones, el Colegio de Bioquímicos emitió un comunicado oficial dirigido a todos sus profesionales, solicitando retomar el uso obligatorio de barbijos, alcohol en gel y reforzar las medidas de bioseguridad, tanto en la atención de pacientes como en el manejo de muestras biológicas.
El mensaje, firmado por la Comisión Directiva, no solo advierte sobre el contexto epidemiológico actual, sino que también insiste en la necesidad de seguir las recomendaciones sanitarias emitidas por los ministerios de Salud provincial y nacional para contener el avance de infecciones respiratorias, especialmente durante la temporada invernal. “Recomendamos el uso de barbijos y alcohol para la atención de pacientes, además de extremar las medidas de bioseguridad”, expresa el texto.
La situación en Misiones se da en paralelo con un llamado a la prevención realizado por el Ministerio de Salud Pública de Corrientes, que, ante las bajas temperaturas y el incremento habitual de enfermedades respiratorias como la gripe, bronquitis, bronquiolitis, neumonía y COVID-19, recordó a la población la importancia de mantener al día el calendario de vacunación, ventilar los ambientes cerrados, lavarse frecuentemente las manos y utilizar barbijo en caso de presentar síntomas respiratorios.
La directora general de Epidemiología de la provincia, Angelina Bobadilla, remarcó que es fundamental proteger especialmente a los grupos más vulnerables, y destacó la necesidad de mantener una alimentación saludable, rica en frutas y verduras de estación, para fortalecer el sistema inmunológico durante los meses más fríos del año. También recomendó continuar con la actividad física habitual y evitar el consumo de tabaco y la exposición al humo.
Entre las medidas preventivas, se pidió especial precaución con el uso de artefactos para calefaccionar: no encender braseros ni estufas a leña dentro del hogar, no utilizar hornos u hornallas con ese fin y evitar colocar recipientes con agua sobre fuentes de calor, ya que esto genera humedad que favorece la proliferación de hongos. Además, se recordó no arrojar plásticos o metales al fuego, porque emiten gases tóxicos, y evitar fumar en espacios cerrados.
Las autoridades sanitarias insisten en no automedicarse ni recurrir a remedios caseros ante síntomas gripales o fiebre. Automedicarse puede dificultar el diagnóstico médico, empeorar el cuadro clínico o incluso causar intoxicaciones. En caso de presentar fiebre u otros síntomas respiratorios, se recomienda permanecer en el hogar, evitar el contacto con otras personas hasta al menos 24 horas después de la desaparición de la fiebre y mantener el aislamiento especialmente de personas inmunocomprometidas o con factores de riesgo por al menos cinco días desde el inicio de los síntomas.
Respecto a la vacunación, el Ministerio de Salud recuerda que la vacuna antigripal debe aplicarse a personal de salud, embarazadas en cualquier etapa de la gestación, puérperas que no se hayan vacunado durante el embarazo, niños de 6 a 24 meses (con dos dosis separadas por al menos cuatro semanas), personas de entre 2 y 64 años con enfermedades crónicas y todas las personas mayores de 65 años. Para estas últimas, no se requiere orden médica, a diferencia de quienes presenten condiciones como obesidad, diabetes, enfermedades respiratorias o cardíacas, inmunodeficiencias, o estén en tratamiento oncológico o con diálisis.
También es importante aplicarse el refuerzo de la vacuna contra el COVID-19 si pasaron más de seis meses desde la última dosis, sin importar cuántas aplicaciones previas se hayan recibido. Esta indicación sigue vigente frente a la aparición de nuevas variantes del virus.
La nueva variante NB.1.8.1: ¿deberíamos preocuparnos?
De hecho, la Organización Mundial de la Salud (OMS) advirtió recientemente sobre la nueva variante NB.1.8.1 del COVID-19, identificada por primera vez en China en enero de 2025, y que ya representa casi el 11% de las muestras secuenciadas a nivel global, especialmente en regiones del Mediterráneo oriental, Sudeste Asiático y el Pacífico occidental. En Estados Unidos, esta variante fue detectada en viajeros internacionales en estados como California, Washington y Nueva York. No obstante, la OMS la mantiene bajo la categoría de “variante en seguimiento” y considera que el riesgo para la salud pública global es bajo. Según el organismo, las vacunas actuales continúan siendo efectivas contra esta cepa.
En este marco, se desató una polémica en Estados Unidos luego de que el secretario de Salud, Robert F. Kennedy Jr., anunciara que ya no se recomienda la vacunación contra COVID-19 para niños sanos ni para mujeres embarazadas. Esta postura fue rápidamente rechazada por múltiples expertos en salud pública, que alertaron sobre el riesgo que implica debilitar las políticas preventivas justo en un momento en el que los virus respiratorios vuelven a ganar terreno.
Así, tanto Misiones como Corrientes coinciden en la importancia de redoblar los cuidados. El mensaje es claro: protegerse no solo es un acto personal, sino también una responsabilidad colectiva frente a enfermedades que, si bien hoy se consideran controlables, siguen siendo una amenaza latente durante el invierno.
