Una docena de radicales alineados con el presidente del radicalismo, Martín Lousteau, y el diputado Facundo Manes, abandonaron el miércoles el bloque que conduce Rodrigo de Loredo. El correntino Manuel Aguirre se fue con la nueva bancada.
La noticia se conoció al caer la tarde, luego de una jornada cruzada por los rumores, que concluyó con la confirmación de la ruptura que el martes parecía haberse evitado.
Sucede que ya al final del día martes, a pesar de haberse alcanzado antes una suerte de entendimiento para poner las diferencias en stand by mientras buscaban caminos de salida, los rebeldes aceleraron pidiendo una reorganización del bloque y cargos en la conducción.
Ya estaba previsto que un grupo de diputados del radicalismo asistiera el miércoles a la Casa Rosada para formar parte de la reunión habitual con el Gobierno a la que también asisten diputados del Pro y el MID, en este caso para hablar fundamentalmente sobre el Presupuesto. Ninguno de los diputados duros del radicalismo se sumó a ese encuentro, y sí estuvo en cambio Luis Picat, uno de los cinco radicales cuya expulsión del bloque reclamaban los que ahora dieron el portazo.
La reunión y los vetos
Ya entrada la noche, el nuevo bloque -que aún no tiene nombre- emitió un comunicado en el que confirmaron su decisión de separarse “para ser coherentes con el mandato de nuestros votantes y con nuestra identidad”.
Confirmaron allí que la decisión del presidente del bloque y un grupo de diputados radicales de “sumarse como aliados al oficialismo” fue el detonante definitivo, pero sumaron también “la votación de aquellos diputados que ratificaron los vetos presidenciales contra el financiamiento universitario y contra el aumento a los jubilados, quedando como único camino construir una nueva alternativa”.
En el comunicado señalaron “el compromiso inquebrantable con la educación pública, los jubilados, el federalismo, el trabajo, las PyMEs y el desarrollo de nuestro país”, y concluyen: “Construir el país que nos merecemos los argentinos es nuestro objetivo”.
El bloque radical que conduce Rodrigo de Loredo queda así reducido a 21 miembros. Los que se van son el correntino Manuel Aguirre, la entrerriana Marcela Antola, el formoseño Fernando Carbajal, Carla Carrizo (CABA), Mariela Coletta (CABA), Marcela Coli (La Pampa), Melina Giorgi (Santa Fe), Pablo Juliano (Buenos Aires), Facundo Manes (Buenos Aires), Juan Carlos Polini (Chaco), Jorge Rizzotti (Jujuy) y Danya Tavela (Buenos Aires).
De estos diputados, solo tres están alineados con gobernadores: Giorgi, con Maximiliano Pullaro; Rizzotti, con el jujeño Carlos Sadir y Polini con el chaqueño Leandro Zdero.
Con información de parlamentario.com