Del 8 al 10 de septiembre en la Ciudad de Buenos Aires se desarrolló el Congreso Regional por la Educación Inclusiva. Bajo la premisa “Transformar políticas y prácticas para garantizar derechos”, dijeron presente más de 30 especialistas internacionales provenientes de Colombia, España, Chile, Italia, Canadá, Costa Rica, Brasil, Ecuador, Estados Unidos, Portugal, Perú, Honduras, Paraguay y Uruguay.
Con inscripciones que superaron las 6000 personas, el Congreso se centró en dos grandes ejes: la educación inclusiva como derecho humano y la educación inclusiva como perspectiva pedagógica, ambos basados en la convicción de que todas las personas, sin excepción, pueden y deben educarse juntas, en espacios que eliminen barreras y provean a cada una los apoyos que necesita para aprender, participar y progresar en igualdad de condiciones.
Para lograr este objetivo, durante el Congreso buscaron desarticular mitos, compartir estrategias, visibilizar experiencias de aprendizaje equitativas y significativas, y aportar herramientas a los procesos de transformación necesarios para que los sistemas educativos de la región sean cada vez más inclusivos.
En ese marco, las organizaciones que integran la Red Regional por la Educación Inclusiva (RREI) elaboraron una declaración final conjunta, en la que se recuperan los consensos alcanzados durante el Congreso. El documento se basa en la convicción de que la educación inclusiva, entendida como una educación para todos y todas sin excepción, donde las y los estudiantes valen por igual, es un proyecto político de transformación cultural y social que exige acciones urgentes.
El pronunciamiento incluye un conjunto de afirmaciones sobre el derecho a la educación inclusiva, exhortaciones a diversas y diversos actores para garantizarlo, y una serie de compromisos que asume la propia RREI. Al finalizar, el documento señala: “Las personas con discapacidad no pueden esperar más. EXIGIMOS EDUCACIÓN INCLUSIVA YA”.
Declaración: